miércoles, 13 de junio de 2012

LA MODA EN EL SIGLO XVIII

Os voy a enseñar algunos retratos del siglo XVIII. Así veréis cómo va evolucionando la moda de esa época. De un estilo recargado y pomposo a un estilo más sencillo hasta llegar a la moda de principios del siglo XIX. Mucho más sencilla.


Los vestidos son preciosos. Pero ese miriñaque tan inflado...Intento imaginarme vestida de ese modo y caminado. ¡Y acabaría en el suelo!

Aunque no se note mucho, el miriñaque que usa la joven del retrato está menos inflado que el miriñaque del retrato anterior.
A principios de este siglo, se usaba un estilo que se llamaba "estilo suelto" porque la parte de atrás del vestido estaba suelta y plisada.
 Esta moda perduró desde principios de siglo hasta la década de 1730.
Las joyas de escaso tamaño sirven para decorar estos vestidos. Pero esto se puso de moda más adelante.
El corsé empezó a estar muy de moda en esta época. El busto de la mujer aparecía aumentado y contenido gracias al corsé. Las cinturas parecían de avispa. Y desaparecía la siempre molesta tripita. Una ventaja...Aunque no tanta...¡Sería imposible respirar con un corsé apretándote!
Es muy típico de esta época, al igual que en el siglo XVII, usar pelucas.
Tanto los hombres como las mujeres usaban pelucas. Todas ellas de color blanco.
Incluso cuando no llevaban puestas las pelucas, se empolvaban el pelo.
Como podéis ver en el retrato de abajo, los peinados que se elaboraban hacia la década de 1770-1780 eran bastante altos. Las mujeres adornaban sus cabellos con cualquier cosa. Todo valía para que fuesen más altos. Joyas...Flores...Plumas...En ocasiones, para que pareciesen que tenían más pelo, usaban, incluso...¡Colas de caballo! Es increíble lo que había que hacer en esa época para estar hermosa.

5 comentarios:

  1. Esa decada fue impresionante nena.
    Un besote

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  2. ¿Te imaginas vistiendo semejantes vestidos y luciendo esos peinados?
    Yo intentaría vestirme y peinarme así. ¡Pero creo que me caería enseguida al suelo! Je, je.
    Un abrazo enorme.

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  3. Me encantaría verme vestida en uno de ellos ^^

    Puede que en algún carnaval lo consiga.

    Besos!

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  4. Hola, Raquel.
    Bienvenida.
    Gracias por dejar un comentario.
    Creo que estarías genial con uno de estos vestidos. Uno de los disfraces más famosos es el de María Antonieta. No sé si algún día me disfrazaría de dama dieciochesca. Entre lo torpe y patosa que soy, no podría llevar un miriñaque así, me asfixiaría con el corsé y la peluca acabaría por tirarme al suelo. ¡Y no digamos bailar!
    Un abrazo y nos leemos.

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  5. En esta época no se utilizaba el miriñaque, este artilugio aparecería en los años 40 del siglo XIX. Los vestidos desde principios del XVIII hasta finales(en Francia hasta la Revolución), se ahuecaban con los panniers o alforjas, pero jamás con faldas de aros, miriñaques o crinolinas. Le daban un frente según la altura de los panniers tipo abovedado o recto hasta casi la cintura pero proyectado hacia los lados. Los frentes siempre rectos, de modo que pecho, cintura y pies estuvieran a un mismo nivel. Según el tipo, la parte de atrás recta desde la espalda si era con la típica capa francesa, o algo marcado el trasero a la inglesa. Otro tipo de artilugio que en España hizo furor era el tontillo, que prolongaba las caderas exageradamente y de forma horizontal al suelo con frente y trasera planos. Y otro tipo más elegante con polisón. Pero miriñaque nunca se usó en esta época. En la romántica se inventó y dirante treinta años fue indispensable en todas las clases sociales. Otro detalle, el pelo no se empolvaba blanco siempre, había más colores, el blanco con polvos de Chipre era el más caro.

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