Hola a todos.
Hoy, vamos a seguir hablando de los personajes más odiados de las novelas. Los Gary Stu y las Mary Sue.
Ayer, hablamos un poco de Gary Stu.
El tema que vamos a tratar hoy es sumamente desagradable para muchos. Hoy, vamos a hablar de las Mary Sues. Lo sé.
Ya hablamos en su día de ellas. Ya hice un análisis de ellas. Pero he estado meditando acerca de las novelas antiguas de autoras clásicas. ¡Todas las protagonistas eran auténticas Mary Sues! ¿Qué no?
Pensemos un poco.
Coged una novela de una autora clásica. Ya sea Shirlee Busbee. ¿Cómo son las protagonistas? ¡Parecen clones!
No encontraréis defecto alguno en ellas. Pueden cambiar el color del pelo y también el color de los ojos. Pero nada más. Son auténticos bellezones. Por eso, además del prota, todos los tíos de la novela van detrás de ella.
Vemos tres grupos:
1-El prota: Casi siempre, hijoputesco. Pero no importa. Con cuatro palabras bonitas, ella cae rendida a sus pies. Y con menos...Y lo pasado...Pasado está. ¿Para qué darle más vueltas?
2-El amigo: Es cariñoso y bueno. La ama. Pero ella parece estar poseída por el fantasma de Ana Steel, la prota de la saga de las 50 sombras de Grey. Le gusta que le haga sufrir el prota.
3 El malo: Esta obsesionado con la protagonista. No parara hasta que sea suya.
Son siempre esbeltas y con un cuerpo escultural. Da igual que la autora sea Shirlee Busbee. O que sea Kathleen Woodiwiss. Las descripciones sobre el físico de las heroínas son largas y tendidas y podemos llegar a saber hasta que numero de pie gastan.
No vais a encontrar defecto alguno en ellas. Porque son todas perfectas.
Puede haber otras mujeres en la novela. Las encontramos en dos grupos.
1-Las malas: Odian a la protagonista. Casi siempre porque la prota es mucho mas guapa que ellas.
2-Las amigas: Admiten que la heroina de turno es mas hermosa que ellas. No tienen vida propia. La escuchan. La aconsejan. Pero su amiga nunca les pregunta por cómo les van las cosas a ellas.
Si seguimos avanzando, la lista de Mary Sues va creciendo. Sobre todo, durante las decadas de los setenta y de los ochenta.
Samantha James introduce en su novela El conquistador a la perfecta Mary Sue.
Alana tiene un físico muy parecido al de otras novelas de la época ya que la novela que protagoniza es de este periodo.
Todos los hombres andan detrás de ella. Principalmente, porque es muy hermosa. La descripción que se hace de su físico es detallada al milímetro.
Alana tiene un pasado muy triste. Nadie en su aldea la quiere debido a su origen ilegitimo. Es la hija bastarda del señor feudal.
Sin embargo, Alana, ademas, posee un don que le permite ver lo que va a pasar.
En resumen...
Si grazna como un pato. Anda como un pato. Es un pato.
Si es perfecta en todos los sentidos. Tiene un pasado triste. Y tiene algún tipo de poder. Lo que estamos es ante una Mary Sue como la copa de un pino.
El conquistador recuerda por momentos a otra novela de Kathleen Woodiwiss. El lobo y la paloma...
Que me perdonen los fans de esta novela, que son muchos. Pero Wulfgar y Aislinn son los perfectos Gary Stu y Mary Sue.
Wulfgar es guapisimo, por supuesto. Y Aislinn es guapisima. Wulfgar se queja de su triste pasado. Todos los hombres de la novela babean tras Aislinn.
La lista de Mary Sues es bien larga.
Prometo otro día seguir con ellas.
De momento, lo dejo aquí. Se nota que no tengo nada en mente en los últimos días. Y escribo esta clase de chorradas.
Portada de una vieja edición de El lobo y la paloma.
Gary Stu y Mary Sue se enamoran ¿? en el medievo.
Me encantan tus análisis de las Mary Sue, no me había dado cuenta de las cosas que dices y ahora mismo voy a fijarme en ello.
ResponderEliminarBesos!!!
¡Hola, Rae!
EliminarYo he tardado algún tiempo en darme cuenta, pero, a medida que iba creciendo, me daba cuenta de que tanta perfección no era posible.
Próximamente, más Mary Sues.
Un fuerte abrazo, Rae.
No son chorradas, son unas reflexiones muy simpáticas ;)
ResponderEliminarHola Trinity.
EliminarEs lo que pasa cuando uno tiene tanto tiempo libre. Que lo ocupa escribiendo sobre Gary Stu y Mary Sue. Je, je.
Aunque no soy muy lectora de las autoras que nombrás, es verdad que suelen ponerse repetitivas las modas entre autores.
ResponderEliminarAhora parece que todas vírgenes que se vuelven adictas al sexo de la noche a la mañana.
Besos